Como si fuera delito o sacrilegio, me sorprendo desnuda, decidiendo si ocupar o no, tu lado de la cama.
Mi cuerpo es cáscara, vacío y crujiente. Cierro los ojos e imagino calor, abrazo, vida.
Necesito refugiarme en tu ombligo, me enrosco y te juro q no molesto.
En silencio y distraida, me va ganando el sueño. *
Lindo. Muy lindo.
ResponderEliminargracias*
ResponderEliminarmuy lindo lo suyo tmb*