viernes, 15 de febrero de 2019

Potencia

Hace un ratito subí a la terraza a colgar ropa. Y aunque el cielo estaba casi despejado, se escuchaban truenos. No muy fuertes, pero sí extensos. Como un ronroneo del cielo. Al bajar, el gato lloraba por comida. Alcé a upa el bolsón de 7 kilos, que ya debe andar por los 3, y recargué el tupper donde guardo pequeñas cantidades más maniobrables. Cada vez que lo hago, desparramo gran cantidad al piso, y como el piso siempre está sucio, me obsesiono pensando que si come de ahí se puede enfermar. Por ende, al menos media ración termina en el tacho. Vuelvo: estaba llenando el tupper, lentamente para no volcar, y el sonido era tal cual el de la lluvia. Más bien el de una tormenta. Y esa tormenta casi me hace llorar. Fue ahí cuando pensé que pelearme con el psicólogo fue una mala idea. Luego pensé que no fue una idea. Fue un hecho, una acción. Las ideas pueden ser muy potentes. Pero de los hechos no se vuelve. Ratito después, me reí de todo esto. Tampoco fue una idea, fue una risa, concreta. Y pensé que tranquila, que todo va a estar bien. Vivir como en una montaña rusa puede ser agotador, pero las montañas rusas están dentro de los parques de diversiones. Debería divertirme más, pienso. Pero es como si adentro de este, mi parque de diversiones, hubiera un sindicato, que pide dignidad para sus trabajadores –corazón estómago y demases: jornada de 8 horas y vacaciones.

jueves, 30 de agosto de 2018

incluso vos

todos entienden
lo que acá pasó,
digo acá y hablo
de este espacio infinito
entre mi pecho y el tuyo
infinito  y bello cuando
lo habitamos
infinito y perdido
cuando nos mudamos lejos.
Todos entienden, incluso
vos habrás de comprender.
Pero yo, te voy a decir
una verdad
nunca me mudé,
y quedé perdida
en ese silencio
sin fin

sombra de invierno

Detrás de todas 
Las lanas que me envuelven
Vengo yo
Y mucho detrás
De mí venís vos
Vestido de sombra
Como de ocaso.
Mirando al frente
Puedo ver 
Que no estás 
Ni ahí ni al costado
Entonces me doy cuenta
Que el de atrás no sos vos 
Sino mi recuerdo
De lo que sentí
Que eras vos

mudanza

llamar al amor como
a una empresa mudadora
que al llegar al camión
tenga una leyenda que diga
a ud. estaba esperando

polaroid

me gusta mucho
enviarte audios
de whatsapp con poemas
que de otro modo
huirían de lo espontáneo
para darse a la fuga
sin mostrarte
cuánto te quiero.

me gustás mucho,
enviar poemas por audio.

miércoles, 10 de enero de 2018

atreve -te-te

Qué alguien se atreva
A decirme que
Estás ahora con los pies
Sobre la tierra y el pasto mojado
O que estás cebando un mate,
muy caliente, muy lavado
Manejando por la autopista
Ezeiza-cañuelas
Mirando un partido de fútbol
Repetido y añejo, del que recordás
Cada falta, cada jugada
Que alguien me lo diga
Que yo voy reír
Y a decir que puede ser
Pero que no
Qué vos estás acá
Donde estoy yo
Mucho más presente que allá
Donde estás vos

tu cara en la cara de la luna

El corazón me late
tan fuerte que
siento que se me va a salir
del pecho saltando, como el conejo
que habita en las sombras
de la luna
Y veo a la luna y a su conejo
y puedo presentir cómo
se va a salir de ella a los saltos