martes, 5 de enero de 2010

Documento -1

Enrarecido el aire espeso, no por eso, sino porque está desangelado. Algo malvado envuelve la atmósfera. Lo veo en los ojos de los otros. No hay dulzura, no hay deseo en el encuentro de los cuerpos.
Perversión.
La descubro por esa pollera que quise ponerme sin darme cuenta que la compré cuando el cuento de un peso un dólar y mi carne y yo estábamos más firmes.
Si las brujerías, las macumbas existen, hoy es el día en que esos conjuros se están llevando a cabo. Puedo sentirlo.
Las vías del tren que no pasa abren el panorama y me sacan el agobio de los pasadizos grises de la ciudad. Pero el brillo de los rieles siempre ahí hoy se parecen más al filo de un cuchillo que al de la luna plateada.
No, no es la pollera, es la paranoia de la soledad y el amor atrapado debajo de las piedritas en el andén.
Pensar en vos es como meter el dedo en una yaga, es como un disco rayado en la mejor canción.

2 comentarios:

  1. Tremendo... y es verdad, nunca es la pollera.

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  2. Mejor sería que fuera solo la pollera. El título de tu blog no van nada mal con este escrito: ¿Qué mirás? http://ojospobres.blogspot.com/

    ultra recomendable! gracias por comentar

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